Y
eso es poco más o menos el tiempo transcurrido desde el martes 13 de enero de
2015 cuando nació en Málaga Ediciones Azimut. Y lo hizo sobre cuatro colecciones que,
afortunadamente, ya resultan conocidas para algunos de los que leen estas líneas.
Muy esquemáticamente, dichas colecciones son:
—Colección
“5 y acción” para libros de cine (ensayos, narraciones, poesía, teatro,
guiones, etc.).
—Colección
“Kandis” para libros de viajes (ensayos, narraciones, poesía, teatro, guías de
viaje, etc).
—Colección
“Harén” para libros eróticos.
—Colección
“Medusa” para libros de calidad singular que por su temática no quepan en las
colecciones anteriores, es decir, una puerta abierta, que no un cajón de sastre,
para libros excepcionalmente buenos.
Más
que una cuestión de géneros literarios, por lo tanto, que además sería un
criterio muy discutible, Ediciones Azimut se articula sobre dos ejes básicos de
coordenadas: la calidad y el tema.
Con
el paso del tiempo, a esas cuatro colecciones iniciales se ha añadido recientemente
una quinta denominada Candelabro, cuyo eje es el humor.
Básicamente
de lo que se trata, con la natural modestia que nos caracteriza, es de aportar
un granito al panorama cultural en lengua española.
CATÁLOGO
Ordenado
por colecciones:
5 y
acción:
—2009, un año de CINE NOSTRUM, de
Francisco Javier Rodríguez Barranco.
Sinopsis: En
este libro se analiza el cine español en el norte de África y el cine árabe
en el sur de España, referido al año 2009 porque en él se
cumple el 400 aniversario de la expulsión de los moriscos de los reinos de
España. Por otro lado, 2009 fue el año en que el Instituto Cervantes tomó el
relevo del Festival de Málaga de Cine Español en la organización del Festival
de Cine Español de Tánger, así como el décimo aniversario de nacimiento de la
Fundación Tres Culturas del Mediterráneo de Sevilla. 2009 fue el año de Retorno a Hansala, de Chus Gutiérrez. Y
2009 fue también el año en que surgió la iniciativa “Cine nómada en las dos
orillas”.
Por
ello en 2009, un año de CINE NOSTRUM
se compilan
festivales y eventos cinematográficos en las riberas del Mediterráneo para
ilustrar la creatividad de esta zona del planeta y para cimentar puentes
culturales a uno y otro lado de este mar de cultura. Todo ello con un estilo
ameno que permite el disfrute de todos los públicos.
—El
cine de Jardiel Poncela, de Enrique Gallud Jardiel.
Sinopsis: Enrique Jardiel Poncela es
una figura destacada en la historia de la literatura cómica española. Fue el
renovador de la comedia en el siglo xx y un hábil narrador, autor de diversas
novelas de gran éxito y alrededor de un millar de cuentos, artículos y poemas.
Asimismo se ha reconocido el gran valor didáctico de sus ensayos sobre teatro.
Pero es en este libro donde por primera vez se pone de relieve su valiosísima
contribución al séptimo arte, una de sus grandes facetas desconocidas.
Como sus compañeros de vanguardia, Jardiel
—miembro de pleno derecho de la Generación del 27— se sintió atraído por el
cine y supo ver sus posibilidades de futuro. Tuvo ocasión de experimentar en
este campo, tanto en Hollywood como en España, en calidad de guionista y de
director. Fue pionero en algunas áreas, como el cine en verso o el comentario
cómico de películas mudas.
Este
volumen incluye un detallado estudio de la labor cinematográfica de Jardiel,
realizado por su nieto —un experto en su obra—, así como una entretenidísima
selección de sus guiones y escritos sobre la industria del cine, nunca antes
publicados. Todos los amantes del arte
de los Lumière disfrutarán con este cuidado producto de la erudición y del
humor.
Kandis
—Spanish
Texas, de Félix Hernández de Rojas.
Sinopsis: Laura
Buendía es guionista de Spanish Texas,
un documental que describe el periodo de trescientos años durante los cuales
Texas estuvo bajo soberanía española.
Laura muere aparentemente en un desafortunado accidente y J., alucinado
detective de serie negra, deberá elaborar un sencillo informe… que sin embargo
desembocará por derroteros inesperados y que dará pie a una fascinante aventura
que cruza el Atlántico. Borrachuzo y de seguro perdedor, J. solo tiene a su
favor para realizar esta investigación una singular arma conocida por
bilocación: sor María de Ágreda ya la utilizaría en el s. XVII y pudo así ser
vista en Texas y Castilla a un mismo tiempo. Sueño o estupidez, mediante dichas
bilocaciones seremos espectadores de una conspiración inquietante que busca
cambiar el designio de mundos conectados.
Estos
misterios hacen de Spanish Texas una
novela de fronteras: a medio camino de lo policiaco y de lo histórico, de lo
procaz y de lo descreído, y en suma, de lo americano y de lo español. Su
lectura habla de sociedades en tránsito, poderosas por aquello que comparten y
unen, más que por lo que las separa.
—La Mujer de Fuego, de Rocío Rejes Ramos.
Sinopsis: Cecilia es
una mujer burguesa pero completamente atípica que, en la recta final de su
vida, siente que tiene que tomar una decisión: o acabar con ella de una forma
elegante o hacer que todo cambie.
El reencuentro con
tres personas muy importantes para ella más ciertas señales que se le presentan
por el camino son determinantes para la decisión que debe tomar.
La Mujer de Fuego es una oda al
guerrero espiritual que vive dentro de cada uno de nosotros.
Harén:
—Mi realidad virtual, de Pepa L. Casanova.
Sinopsis: Escribo desde hace unos quince años. Nunca me planteé
la posibilidad de publicar nada de lo que tengo custodiado como si de un tesoro
se tratara. Vivencias, alegrías,
ilusiones, frustraciones, amores, desamores… la vida comprimida en unos
pocos tomos. No he tenido hijos, ni he plantado ningún árbol (como mucho he
trasplantado alguna que otra maceta, pero poco más) y sentía la necesidad de
dejar constancia de mi paso por el mundo.
Desde
hace tiempo hablo con amigas y conocidas
que al igual que hice yo, se inscribieron en Internet para buscar pareja. Me
resulta increíble y sorprendente la
cantidad de coincidencias, anécdotas, momentos divertidos, decepciones, apegos
y desapegos, dependencia emocional… tantas cosas que se ponen de manifiesto en
este tipo de contactos y que todas hemos compartido de alguna manera. Era
habitual que más de una me comentara: “De mis relaciones con los hombres
en Internet, tengo para escribir un
libro”.
¿Y
por qué no? Pensé. Yo tenía ya el trabajo hecho, sólo faltaba pasarlo al
ordenador y publicarlo. Me centré en el periodo 2005-2006, desde que me apunté
por primera vez hasta que…
—Los brazos de Venus, de Francisco Javier
Rodríguez Barranco
Sinopsis: En
el poema “Yo persigo una forma que no encuentra mi estilo”, Rubén Darío
compartía la melancolía causada por la persecución de lo inasible mediante
versos tan memorables como éste, que cito literalmente: “al abrazo imposible de
la Venus de Milo”. Y eso es lo que me propuse narrar en esta colección de
relatos fugaces: impulsos fronterizos. Metáforas de la inconsistencia y la
soledad, o como poco de la singularidad. Sueños insomnes, teoremas sin
conclusiones, fantasmas sin castillo o abrazos sin brazos. Nos hallaremos,
pues, con personajes bajo pasiones evanescentes, atónitos ante esta realidad
que se les escurre con mayor o menor carga de erotismo según los casos. Ahora
tan sólo espero que sean de su agrado.
MEDUSA
—Majaderos
ilustres. Biografías cómicas, de Enrique Gallud Jardiel.
Sinopsis: ¿Por qué ocuparse de los majaderos del pasado teniendo
tantos y tan preclaros en nuestros días? La razón es que los antiguos son
majaderos «completos», eso es: han llegado
al cenit de sus posibilidades majaderescas, mientras que de los del presente (a
los que todos vemos todos los días en los telediarios) aún podemos esperar
muchas perlas que completen su palmarés.
Enrique
Gallud Jardiel —humorista de la saga de Jardiel Poncela, su ilustre abuelo—,
que ya se despachó a gusto desmitificando a los literatos plúmbeos en su Historia estúpida de la literatura y
zarandeando a los periodistas analfabetos en su Español para andar por casa, la emprende ahora con las figuras de
la historia: esa «mentira encuadernada», que dijo el otro.
La
Historia, señores míos, está repleta de gente, es el camarote de los hermanos
Marx de la eternidad. Y los personajes históricos elegidos para este repaso lo
han sido por sus culpas irredentas. Los hay poco simpáticos. Hay muchos
asesinantes o asesinadores, que mataron mucho y bien para poder mangonear el
mundo a placer. Otros destacaron por su arte, por estar como una cabra o, en
muchos casos, por las dos cosas a la vez. A la hora de seleccionar majaderos en
los anaqueles del tiempo no ha faltado donde elegir. La tarea más ardua del
semblanzador ha sido decidir cuándo parar, pero aun así muchos cretinos se han
quedado fuera. ¡Qué se le va a hacer! Como dijo Quevedo: «Yo he hecho lo que he
podido; Fortuna, lo que ha querido».
CANDELABRO
—Puta,
pija y perversa, de Ramón Paso.
Sinopsis: La historia de una mujer
en constante huida.
Gema
tiene mucho encanto, es fascinadora y pocos son los hombres que, al conocerla,
no caen rendidos ante ella. La voz de Gema es dulce, sus ojos parece que bailan
cuando sonríe, tiene sentido del humor e ingenio... y folla con una alegría y
dejadez adictivas. También tiene tres novios distintos, ninguno de los cuales
sabe de la existencia real de los otros dos... y además, tiene una postdata, un
chico que le sirve para los ratos muertos. Gema tiene un carácter tentador al
que es imposible escapar... y un montón de problemas. Gema, para huir de la
realidad, tiene un cuento donde ella es una princesa – como quiere serlo en su
sórdido día a día de secretaria – pero con el pelo de alambre verde.
Ésta
es una historia de princesas que se comen monstruos, y de enanos sarcásticos
que se comen princesas... Y con final feliz...
PROYECTOS
A corto plazo, ya estamos trabajando
con la novela Eslabón de papel, de
Guadalupe Eichelbaum, para la colección Kandis, y El amor es un microbio, sobre textos de Enrique Jardiel Poncela, en
edición anotada de su nieto Enrique Gallud Jardiel, para la colección Medusa.
A medio plazo, sobrevivir, al menos,
otros veinte meses, que no nos parece empeño menguado.
Y, bueno, también hay alguna que
otra sorpresita que esperamos ir desvelando durante los próximos meses.
Francisco Javier Rodríguez Barranco